sábado, 10 de diciembre de 2011

El regreso de Melendi (II)

La vida es para los valientes


Llevo días pensándolo y cada movimiento lo confirma.
Claro, que eso tiene sus riesgos. Puedes ganar o perder; vivir o morir en el intento...

Acostarse pensando lo afortunado que es uno, que tiene tanta suerte, a pesar de todo... No tiene precio.

Siempre jugando con el destino y sus avatares, como marionetas que no se sabe quién mueve a su antojo esquivando los pelotazos, como en un Grand Prix continuo. Apostando al todo o nada, sin contemplaciones. Igual que aquellos últimos coletazos de la peseta, a cambiarlo todo de golpe, que se acaba el mundo!!

Y no, no se acaba...

Como muchas otras veces, Show must go on

http://youtu.be/4ADh8Fs3YdU


A todos aquellos que viven sin mirar ni para atrás ni para adelante, gracias por compartirlo. Hoy. Ahora.

miércoles, 9 de febrero de 2011

Y es que allí se inventó todo...

A veces no importa mucho actualizar el blog, la vida sigue pasando y todo igual... como siempre, en plan cachalot-trozo, fantasma de una vida tranquila, silenciosa y límpida.
Pero es un día especial, soy ya una teórica! Así que me siento con derecho para hacer una observación:

Todo es mentira.

Fue mentira la ayuda de alquiler para jóvenes, que el hombre llegara a la luna, la presunta escenita de ricky martin en sorpresa sorpresa - la de la mermelada-, los reyes magos y el ratoncito pérez, aunque tenga su casa en Madrid.
La historia, tanto la que está en los libros como la más reciente, está plagada de datos no del todo precisos y variables, según el narrador y sus intereses.
También las palabras se asocian a momentos históricos y muchas expresiones están ligadas a fechas o ideas.

Cuando a los estudiantes se nos cita a según qué figuras del panorama pseudointelectualoide - yo te digo a ti Chomsky y tú frunces el ceño directamente, no? - pues eso. Tú tomas lo que diga alguien así al pie de la letra, se da por hecho y a veces, nada es lo que parece.

Se dice que la literatura hispanoamericana cumple su mayoría de edad en el Modernismo, y se repite una y otra vez el tópico de la mayoría de edad de un pueblo, la identidad americana. De manera que en términos literarios tu asocias "mayoría de edad" = "modernismo hispanoamericano" y queda así grabado en tu cerebro. Lo dijo Octavio Paz, por ejemplo, tú te lo crees...

Pero, aquí viene la exclusiva, resulta que esa imagen ya existía, que no es producto americano, de no mucho antes, pero existía... así que no vengan con aires de innovadores, que luego eran unos copiones. Copiones y llorones.

En 1868 se escribe La educación sentimental, de Gustave Flauvert.

"La libertad permanece en manos del patrón, y el asalariado, incluso para la justicia misma, sigue siendo inferior a su amo, puesto que su palabra no es creída. Por fin, la República me parece vieja. ¿Quién sabe? Quizá el progreso no sea realizable sino por una aristocracia o por un hombre. La iniciativa viene siempre de lo alto. El pueblo es menor de edad, por más que se diga".

En este caso, se aplica el concepto "menor de edad" para describir la sociedad francesa en pleno desarrollo industrial que se debate entre la República, la Monarquía o la Dictadura, según la opinión del protagonista, Frédéric. Este concepto hace referencia a la falta de libertad y de igualdad entre los individuos. Que, en ese sentido puede equipararse a la menoría de edad hispanoamericana, claro, pero que se trata de otra cosa. Otra cosa.

Y ahora, como me han dicho que se lleva esto del relato circular - gracias a mis colaboradores, of course - y para explicar el título, recurro a otro tópico que seguro que también es mentira.

20 años antes de que surgieran los denominados "precursores del modernismo", Flauvert escribía eso en Francia. Los franceses lo han inventado todo.



[Pajas mentales que no puedo contar a nadie, aquí, ahora]


I love sofá amarillo + clima tropical + napolitanas de chocolate y choricitos.
... y a vosotros, claro.